El binomio genes y tipo de hábitos va a determinar el grado de envejecimiento al que está sometido nuestro organismo.
Afortunadamente, hoy en día es muy sencillo realizar un test genético, con una pequeña muestra de saliva, podemos conocer “con nombre y apellidos” que mutaciones o variaciones hay en nuestros genes que podrían favorecer determinadas enfermedades.
Hay que dejar bien claro, que tener una variación o mutación en un gen no implica necesariamente que ese gen se exprese y determina la aparición de la enfermedad. Por el contrario, es una información muy valiosa que nos da a conocer a qué estamos predispuestos. Promocionar la salud con un estilo de vida saludable y prevenir la enfermedad con las revisiones médicas adecuadas, favorecerá la no expresión del gen mutado, y eso depende de la actitud que adopte la persona, de forma libre pero con información.
Para conseguir poner en marcha todo esto en primer lugar dependerá de la actitud que tengamos ante la vida: Una actitud positiva.
En definitiva, un cambio de creencias limitantes que te permitir´na empoderarte y conseguir vivir rejuveneciendo, vivir “sin edad”, porque la capacidad está dentro de ti. Esto se llama COACHING ANTIAGING.
Los alimentos son los mejores medicamentos. Pueden ayudarte a neutralizar los procesos de oxidación, de inflamación, enlentecer el proceso de envejecimiento, aumentar tu calidad de vida y la plenitud.
Y recuerda, si quieres puedes, y si puedes debes